Publicado el viernes 27 de junio del 2025

Entre avances limitados, notas informales y discusiones técnicas, la SB62 sienta algunas bases y deja otras aún por construir. Repasamos los principales temas a seguir camino a Belém.

Mitigación y Balance Global (GST1)

Las discusiones en mitigación se centraron en el diseño del marco de trabajo y el desarrollo de una plataforma digital para dar seguimiento al Programa de Trabajo de Mitigación. Se registraron pocos avances concretos, aunque el umbral para limitar el calentamiento global a 1,5°C por encima de los niveles preindustriales se reduce cada vez más. En cuanto al Balance Global, las Partes continuaron debatiendo cómo traducir las decisiones de la COP28 (salida progresiva de los combustibles fósiles, triplicación de renovables y duplicación de eficiencia energética) en medidas concretas. El texto actual contiene múltiples opciones y refleja las mismas brechas a las de COP29 en Bakú.


NDCs y objetivos a 2035

Hasta la fecha, solo 24 países han presentado sus nuevas Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) con horizonte 2035. Las Partes tienen hasta finales de septiembre para entregarlas ante la CMNUCC. Estas deberán ser operativas, concretas y alineadas con el objetivo de 1,5°C.


Transición justa

El programa de trabajo para una transición justa fue uno de los espacios más productivos de negociación en Bonn. Las Partes mostraron voluntad de diálogo y se avanzó hacia una nota informal con elementos clave que podrían conformar uno de los resultados relevantes de la COP30. Destacan las menciones a derechos, equidad y nuevos arreglos institucionales. La cuestión de las medidas unilaterales, especialmente en el ámbito comercial, ha vuelto a ser un tema muy debatido.


Adaptación y GGA

Aunque la pérdida y daño no fue un eje central, se abordaron cuestiones relevantes de adaptación. Se acordó reducir los indicadores del Marco Global de Adaptación (GGA) de 489 a menos de 100, considerando medios de implementación, factores habilitadores y aspectos transversales. También se incluyó la hoja de ruta de Bakú y se estableció un cronograma para completar el trabajo técnico antes de la COP30. Persisten divergencias en torno a los medios de implementación y la financiación.


Financiación climática

La financiación continúa siendo uno de los puntos más complejos. Las negociaciones abordaron la diversificación de fuentes, especialmente privadas. Las diferencias sobre las obligaciones para los países desarrollados establecidas en el Artículo 9.1 del Acuerdo de París fueron una reivindicación clave. Pero, al no incorporarse a la agenda oficial, se realizaron consultas informales. Se espera que este tema vuelva con fuerza en la COP30. La Cumbre de Sevilla sobre la financiación para el desarrollo (FF4D), que arranca la semana que viene, será un espacio relevante de discusión.


Presidencia brasileña de la COP30

La Presidencia de Brasil presentó una visión participativa basada en la idea del "mutirão". En el plenario ha afirmado que la COP30 marcará una nueva generación de COP como plataforma que acelera la entrega, realiza un seguimiento del progreso y permite la implementación mediante la conexión con la vida real y el terreno. Se espera que esta narrativa se refleje en el diseño del espacio en Belém y en los resultados de la conferencia.


Próximos pasos

En los meses previos a Belém, se espera que las Partes trabajen en sus compromisos nacionales, reuniones bilaterales y espacios temáticos. La acción climática continúa dentro y fuera del proceso oficial, en particular a través de la Agenda de Acción Climática Global que reúne a todos los actores de la sociedad civil hacia una transición justa e inclusiva. La COP30 será clave para responder a la urgencia del momento y consolidar los avances de los últimos ciclos.